Casi la mitad de los españoles prefieren el renting de móviles

 Este nuevo modelo de consumo se abre camino en España con una inflación superior al 7%, donde el 70% de la población cree que un teléfono es demasiado caro para ser un producto que pierde un 30% de su valor nada más salir al mercado.

El teléfono móvil se ha convertido en la primera necesidad en la vida diaria de cada persona. Ya sea para comunicarse, trabajar o jugar, este dispositivo es utilizado por la gran mayoría de las personas, aunque no todos están dispuestos a tanto en un dispositivo que ha perdido el 30 % de su valor cuando era nuevo. Así, en un momento en el que la inflación supera el 7% y la riqueza familiar se reduce, hasta el 40% de los españoles preferiría un móvil nuevo alquilado antes que pagarlo completo al comprarlo.

Inicialmente, las compañías telefónicas ofrecían este dispositivo a cambio de durabilidad. Pero desde hace una década, el mercado no ha dejado de crecer. Los fabricantes decidieron diseñar teléfonos utilizando las últimas tecnologías, lo que les permitía tener una amplia gama de teléfonos, y el usuario podía elegir de acuerdo a sus necesidades y presupuesto. Pero eso significaba que nacieron con un envejecimiento planificado y que tenías que comprar un teléfono cada pocos años, haciendo que los precios cada vez sean más altos. 

De hecho, casi el 70% de los españoles piensa que los dispositivos móviles están sobrevalorados. Así lo refleja el reciente estudio "Tendencias en el uso de los dispositivos móviles" de Rentik, el servicio de alquiler de móviles pionero en España, donde la idea de comprar un teléfono móvil "sea historia".

Este modelo de negocio era común en productos donde la devaluación era muy fuerte y no tenía sentido comprar. El más famoso es el alquiler de coches, un sistema que ha crecido rápidamente España en los últimos años y en el que se pretende introducir los teléfonos móviles. Según el CEO de Rentik, Pablo Blanco, "estrene móvil siempre que quiera" pagando una tarifa plana mensual a partir de € 12 con una duración de 24 meses.

Un sistema que ya es habitual en los países de nuestro entorno y que cada vez interesa más a los españoles. Según la encuesta, a día de hoy el 40% de los españoles está dispuesto a cambiarse a un servicio de alquiler de teléfonos porque, entre otras cosas, entre los principales deseos de los españoles relacionados con los teléfonos móviles está un terminal a estrenar. El 48% de los encuestados lo considera importante.

Además, el arrendamiento ofrece la oportunidad de usar un terminal moderno y reemplazarlo con más frecuencia, que es una de las opciones más buscadas por las personas menores de 35 años. Actualmente, el 56% de los españoles cree que es muy importante tener un modelo de teléfono nuevo y moderno, y el 48% está muy o muy interesado en un nuevo teléfono móvil. Por tanto, la población a la que le gusta lo último son los jóvenes de 25 a 33 años, especialmente los de Castilla-La Mancha y Valencia.

Según el estudio, el motivo de los cambios está relacionado principalmente con la duración de la batería y el tamaño del dispositivo. Y el hecho de que el 24% de la población cree que el tamaño importa. Como resultado, el 46% de los españoles cambia de teléfono cada dos o tres años, aunque solo el 13% vende teléfonos usados. 

Esto significa que el dispositivo no es rentable. Los cuelgues y caídas son uno de los quebraderos de cabeza más comunes cuando hablamos de teléfonos móviles. Como resultado, casi el 50% de los españoles rompe su teléfono móvil y muchos no reparan su teléfono después de que se rompa por no invertir más en su teléfono (62%). Además, con un precio tan alto, otro problema de invertir grandes sumas de dinero en un teléfono es la posibilidad de que se pierda o incluso se lo roben. Según Rentik, que tiene un seguro de robo, cada año se producen 1.500 robos de móviles en España.